Habrá ocasiones en las que llegar al orgasmo no se trate solo de relajarse si la persona tiene alguna afectación que va más allá, pero en la mayoría de los casos se trata de un tema puramente psicológico y que se puede solucionar a través de la relajación, pero… ¿Cómo puedes relajarte y dejarte llevar?
Lo primero que debes hacer es respirar, pero no de cualquier manera; siéntate con las piernas cruzadas, con la espalda recta y los ojos cerrados, inspira y llena de aire tu diafragma, aquí notaras como tu barriga se infla y cuando esté bien llena de aire, sigue inspirando por los pulmones, cuando no puedas llenarlos más haz un último esfuerzo, inspira un poquitito más, cuando ya no puedas más expira muy lentamente todo el aire disfrutando de este momento.
Repite este ejercicio cinco veces y no te olvides de disfrutar la respiración, así no lo creas ejercitar la relajación es la parte más importante (y así no lo parezca) la más difícil, una forma de hacerlo es practicar yoga o técnicas de relajación muscular.
Cuando tengas dominado eso de relajarse, te recomendamos que prepares el ambiente para el encuentro sexual o la autoexploración, pues al tener esa área cubierta como te gusta, podrás dejarte llevar de manera mucho más fácil y cómoda, cuando sientas que estás en un nivel de excitación bastante alto, recuerda la forma de respirar que te hemos explicado anteriormente y aplícala, luego empezaras a notar como tu cuerpo fluye y tiene nuevas sensaciones.
Es posible que no llegues al orgasmo a la primera, pero eso no quiere decir que no vayas a disfrutar de la excitación y del momento, recuerda que el orgasmo no puede ser tu único objetivo.
Aplícalo y cuéntanos como te va ♥